Coincidiendo con el estreno del último film de Steve Soderbergh,» Presence», adscrito al género de terror sobrenatural de casas encantadas. Una película que está siendo celebrada como un film original que innova con la premisa de rodar sus imágenes desde la óptica del espectro que habita en la mansión.
Pero, como veremos a continuación, no lo es en absoluto: «I’m a ghost» rodado en 2012 y, por si fuera poco, «A ghost history» (2017), ofrecen méritos artísticos y formales de mayor calado.
Un tercer film que también será comentado más tarde,» The Power «, desarrolla brillantemente y con antelación, el giro de guion que «resuelve» la trama argumental del film de Soderbergh.
HAUNTED HOUSE
Uno de los géneros mas antiguos de la cinematografía universal , el cine haunted house, remonta sus albores hasta finales del siglo XIX, con títulos pioneros rodados por el mismísimo Georges Méliès»: Le manoir du Diable» (1896) y «L’ auberge ensorcelée» (1897) .
Para asentarse definitivamente con las canónicas » The Inocents» (inspirada por el relato » Una vuelta de tuerca» de Henry James) dirigida en 1961 por Jack Clayton , y «The Haunting» (1963) de Robert Wise, que elevan el género con su cuidada atmósfera gótica y, en el caso de «Los Inocentes», con el añadido de una ominosa y evanescente taumaturgia onírica que la hace única; ambas alejadas del exabrupto visual y contundente de obras creada en décadas posteriores. La premisa recurrente que desarrolla los aspectos más aborrecibles y violentos de las entidades sobrenaturales, se desarrolla con la eclosión del ‘Satanic Panic’ , esbozando un relato hiperbólico que relata fenómenos paranormales en la estela de la saga «Amytville Horror», que desencadenará múltiples sucedáneos. En la década de los 80s, destaca poderosamente la adaptación de la novela homónima que bajo el título de «El resplandor» lleva a cabo Stanley Kubrick. Y, en la de los 90s, podemos asistir al declive mortal de la saga » House» que irrumpe con su cuarta entrega, pero que sin embargo convive con el extraordinario ‘Mockumentary ‘ de culto especial para Halloween, «Ghostwatcher» , dirigido en 1992 por Lesley Manning. Con la llegada del siglo XXI encontramos títulos que engrosan las filas del J- Horror mezclando ‘black comedy’ y sanguinolento ‘ splatter’. O Intentos de fusionar el género con las frecuencias del ‘ body horror : «A semente do mal» (2023) de Gabriel Abrantes.
Títulos que plantean posturas opuestas a las que presenta el enorme filón que la productora Blumhouse ha encontrado con su franquicia «The conjuring», con base en el facilon ‘ jump scare’, y en torno al famoso matrimonio compuesto por los parasicólogos apellidados Warren. Bien entendido, que el cambio de centuria trae consigo otros films interesantes, algunos de esto dentro de las filas del llamado ‘ elevated terror, que tendrán cabida en otros repasos más extensos. Pero me gustaría acabar este apartado con un film clásico que, rodadao a partir de la novela homónima escrita por Josephine Leisle, que fue publicada en 1945, este es :» El fantasma y la señora Muir»; obra que presenta una interacción efusiva y empática entre muerto(s) y viv(a)os, que siendo otro de los objetivos de » Presence», no está en absoluto logrado por sus creadores.
Finalmente decir que valga este repaso de cintas clásicas del género como alternativa para captar texturas y matices, inquietantes e inmersivos, inherentes a los tropos y estilemas del mismo que, en la película del señor Soderbergh, brillan por su ausencia, constituyendo una función que ni emociona ni asusta, y eso, es lo peor que puede ocurrirle a un film de terror.
LA PROPUESTA DE SODERBERGH
El rodaje de «Presence» se inició en septiembre de 2023 durando tan sólo 11 días. Su premier se celebró en el festival de Sundance en enero de 2024. Y su explotación por parte de Neón en salas de cine, se inició en Nueva York a partir de enero de 2025 tras comprar sus derechos por 5 millones de dólares. El film finalmente ha llegado a las pantallas españolas este 7 de marzo.
Y este es básicamente obra de dos artífices principales:
David koepp: guionista adscrito al ‘mainstream’ famoso por su participación en «Jurassic Park», pero también por sus colaboraciones en sagas como «Misión imposible» , » Spiderman» e » Indiana Jones».
Steve Soderbergh: ganador de la prestigiosa Palma de oro del festival internacional de cine de Cannes con su segunda película,» Sex, líes and videotapes, que pasaba por ser el sumun del cineasta independiente de la década de los 80s, cuando a partir de la última mitad de los 90s se convirtió en un niño mimado de los grandes estudios con películas como «Out of sigh» (1989) y Erin Brocokovich ( 2020) para posteriormente ser defenestrado por los mismos, e iniciando una carrera que cabalga como un jinete drogado con abulia creativa.
El primero es prácticamente un advenedizo en el cine de terror, que ha colaborado con Soderbergh anteriormente con otros dos títulos de géneros diferentes: el thriller heist (película de robos) » Logan’ s Luck, que parece el pariente pobre de » Ocean’s eleven»; y El más reciente «Kimi» de 2022, otro ‘ Chamber film » de presupuesto precario con pretensiones de ‘ Tech noir’ totalmente prescindible.
El segundo cuenta con una experiencia previa en el género rodada con I phone : un enorme contraste con su etapa (2001-2007), en un gran estudio y rodeado de grandes estrellas de Hollywood, mientras rodaba la trilogía «Ocean’ s eleven» rodeado de la ‘creme de la creme’. En cualquier caso, el film mencionado se titula » Unsane» y es la enésima versión del thriller psicológico en el cual el protagonista duda de su cordura a raíz de los acontecimientos que le toca vivir: cansino, aburrido con todas sus improvisaciones fallidas.
El segundo, esta vez camuflado, no es otro que Peter Andrew ( así se llamaba su padre), el director de fotografía y editor encubierto tras el nombre falso que Soderbergh utiliza desde su segundo película.
EL FILM
Se trata a todas luces de una producción ‘ low cost’ rodada enteramente en el interior de una casa. Un ‘ Chamber film ‘ o film de cámara minimalista que repite planos secuencias que recorren lA mansión de arriba abajo y viceversa, con alguna variante que incluye la vista del exterior a través de una ventana: son los recorridos costumbristas del ente muerto que deambula en su interior. La sensación de que el espectador mira la película desde la perspectiva de la presencia espectral, está resuelta con base en dos presupuestos formales: filmar durante todo el metraje con una lente gran angular que registra la «acción» y la actuación de lis actores cin un barrido en horizontal , de un lado a otro del plano, previsible y desmañado; más la aplicación de la cámara subjetiva que trota confusa y atropellada. Aportes formales y técnicos que, más allá del novísimo del aparato que utiliza ( Sony a9 III) no ofrecen la menor sorpresa, por no nombrar el riesgo y audacia que algunos le atribuyen; un film menor que se apropia de hallazgos de otros biodegradando su impronta, y trasladando su potencial al territorio del cliché burdo.
Las costuras mal hilvanadas de sus escenas, se apretujan entre unos fundidos en negro que parecen una copia espuria de los utilizados por Osgood Perkins en su memorable «Im the pretty thing house».
El apartado actoral una anodina Lucy Liu cuya intervención no trasciende la anécdota . Y una joven Callina Liang esforzada y eficaz ente los rigores del espantoso desaguisado: ni su guión ni la traducción de este en imágenes resultan relevantes.
Por último diré que la consabida e inevitable irrupción del personaje del clarividente, es una de las menos carismáticas de todos los tiempos: toda la secuencia en la cual interviene es insulsa, y se basa en una endeble y mediocre labor de Koepp.
I AM A GHOST
Dirigida en 2012 por HP Mendoza a partir de un guion de su autoría, cine independiente norteamericano, aquel del cual el actual míster Soderbergh es apostata.
GHOST STORY
Un film sin duda más imaginativo (¡e incluso paradigmatico!) que mezcla la habitual historia de terror gótico sobrenatural con realismo mágico y un humor más allá de los negros registros del cadalso . Un paso (al) más allá de films como «The ghost story», el film de David Lowery está íntegramente narrado desde la óptica de un fantasma.
La variedad de registros técnicos argumentales desbancan al mediocre guion de David Koepp y a la endeble dirección de Soderbergh, convirtiéndose en una película de viajes en el tiempo sobrenatural con un trasfondo romántico empapado de ‘ low fantasy’.
Me resulta inverosímil pensar que los responsables de «Presence» copiaron sin gracia las innovadoras propuestas de éstos títulos…
Y aún:
THE POWER: EMPATIA Y SORORIDAD MÁS ALLÁ DE LA EXPERIENCIA TERRENAL
Desmintiendo cualquier atisbo de originalidad en el guion del señor Koepp, a pasar de que este se jacte de ello, la idea del fantasma afable que más que aniquilar a los mortales pretende protegerles, sobre todo, salvarles de un destino como el suyo, está presente en este magnífico y oscuro film que sobresale ante » The Presence».
Habilidades telepáticas como enviar enviar mensajes a los vivos revitalizar el género en este asombroso experimento con regusto feminista que, además se encudea en uno de los pasajes de la reciente Inglaterra más controvertidos. Un film estrenado bajo el título de » The Power» dirigido en 2021 por Corinna Faith. Sombrío y por momento estremecedor, me parece infinitamente superior al reseñado.
OTROS TÍTULOS DE INTERÉS
«The little extranger» (2018)
«The strings» (2020)
Auténtico cine independiente del que no sabe hacer Soderbergh. Claustrofobia y melancólico. Un ejemplo de » slow cinema» de horror contemporáneo subyugante e inmersivo.
Queda muy lejos este actual Soderbergh del joven de talento que deslumbró en la década de lis 80s . Y que se atrevía con proyectos de alto riesgo como » Kafka» y » Schizopolis»… ¡Una lástima!
