Don't Think Twice, It's All Right
El pasado viernes 31 de mayo por la noche asistimos al concierto de «Slowhand» y aquí van las siete respuestas a las 7 incógnitas que planteé a finales de noviembre del año pasado.
“Stranger in Town”, cima artística y comercial de Seger, es sin duda uno de los mejores discos de los años 70’s. Y eso es mucho decir. Un álbum perfecto de cabo a rabo que balancea de manera insuperable entre el más fiero RnR y las baladas más profundas, de las que te llegan a lo más hondo sin almíbar ni sobreactuación.
Definir a Marco Mezquida como un virtuoso del piano sería de lo más lamentablemente reduccionista que podría escribir hoy. Porque si bien lo es, y mucho, también es muchas cosas más. Un creador de paisajes sonoros que parte de la libertad que le otorga el “Free Jazz” para realizar viajes con inicio pautado y pasional pero travesía y final desconocido.
Acercarse en pleno 2024 a un concierto de los escoceses The Silencers no es un simple y vacío ejercicio de nostalgia, sino que es una inmediata recompensa de celebración, ganas de pasarlo bien y toneladas de (muy) buenas canciones. Y la presencia, actitud y aura de Jimme O’Neill es la explicación a todo ello.
La Pousette-Dart Band es sin duda una de las mejores encarnaciones de aquel género musical llamado Soft Rock, denostado en su momento y levemente reivindicado con el tiempo. Nacido a principios de los 70’, podríamos decir que es un estilo difícil de definir pero plenamente reconocible a la primera escucha.
Debuta en 1970 con la banda “The American Dream”(cuyo epónimo debut será la primera producción del legendario Todd Rundgren), a mediados de década se establece como artista en solitario (“A Crowd of One” de 1986 es su segunda y última obra) y también produce un par de discos a Tim Moore, a su colega Paul Butterfield, y a Foghat.
Encarna perfectamente Jean-Patrick Capdevielle ese espíritu renacentista que invadió Europa a mediados de los 60’s, esa intención de tocar todos los palos posibles que supuren Arte. Periodista, fotógrafo, pintor y compositor, viaja por los USA, se establece un tiempo en Ibiza y vive de lleno la explosión del Swinging London, donde alterna con todos los nombres importantes del momento y se hace íntimo de Eric Clapton.
Podríamos definir «Tejas» de ZZ Top como un álbum de transición, renovación y cierre de etapa. Una suerte de bisagra que anticipa el gran cambio (estilístico y visual) que estaba por llegar. Es todo eso, y a la vez, un gran, gran disco.
El cuarto álbum de Tom Petty (y último con los Heartbreakers originales) «Hard Promises» (1981) es un auténtico milagro. ¿Cómo catalogar sino un pluscuamperfecto conjunto de canciones paridas bajo la asfixiante presión de la lucha con su discográfica y con la alargada sombra del mega éxito de su anterior disco.
Un recital de Rush de dos horas y media englobado en el Time Machine Tour (capturado magníficamente en el DVD «Live in Cleveland»), una gira mundial que «obligó» a muchos españoles a peregrinar por Europa en la búsqueda del “Santo Grial” musical. En el caso de Frankfurt 26 temas (divididos en dos partes y un bis) con un divertido aperitivo en forma de video que dio paso a un inicio demoledor.