A buen seguro el film de Luhrmann atraerá nuevos seguidores y conseguirá subir el decaído número de visitantes a Graceland en estas fechas de agosto, dos tercios menos en los últimos 10 años. Es una película que desde nuestra perspectiva tiene un enfoque equivocado, y a pesar de que a nuestro juicio deja pasar una oportunidad histórica de poner sobre la mesa el verdadero legado cultural y musical de Elvis, no deja de ser espectacular en apariencia. Ahora bien, seguiremos recomendando a aquellos que quieran acercarse en profundidad a la figura de Elvis Presley lo haga a través de la lectura de la biografía de Peter Guralnick. Larga vida al Rey.